Los expertos sostienen desde hace tiempo que las mujeres padecen con menos frecuencia que los hombres la enfermedad de la apnea obstructiva del sueño. La apnea obstructiva del sueño es una afección que se produce durante el sueño cuando las vías respiratorias se obstruyen, lo que provoca que la respiración se detenga y se inicie, y a menudo causa ronquidos. Sin embargo, hasta hace poco, los investigadores no estaban seguros de la frecuencia de este trastorno en las mujeres.
Se calcula que 100 millones de personas padecen apnea del sueño en todo el mundo, con una proporción estimada de 3:1 de hombres frente a mujeres. Sin embargo, esas cifras pueden ser más elevadas de lo que se pensaba en un principio, al menos entre las mujeres.
Además de causar problemas de sueño a los afectados, la apnea del sueño también provoca otros problemas peligrosos en todo el organismo, como depresión, ansiedad y obesidad. También se ha descubierto que causa o empeora enfermedades como la diabetes, los accidentes cerebrovasculares, las cardiopatías y el cáncer. Gran parte de esto tiene que ver con la disminución de los niveles de oxígeno en sangre que se produce debido a la lucha por respirar.
El Dr. Raúl García trata a pacientes con apnea del sueño en su clínica de Miami, Florida. Afirma que el mayor número de diagnósticos entre las mujeres puede ser una mala noticia, pero también puede ser buena según las circunstancias.
“Obviamente, no queremos más diagnósticos de apnea del sueño en ningún grupo”, afirma. “Pero saber que existe un mayor riesgo en las mujeres hace que sea más fácil detectar entonces la apnea obstructiva del sueño en ellas. No es tan fácil descartarla, pero debería ser más fácil tomarla en serio”.
García afirma que la apnea del sueño también puede causar fatiga extrema, que a su vez puede provocar una larga lista de otros problemas a lo largo del día.
“No queremos que la gente trabaje fatigada ni conduzca fatigada”, afirma. “Un estudio reciente descubrió incluso que las personas con apnea del sueño tienen dificultades para mantener un trabajo y son menos propensas, incluso a medida que envejecen, a conseguir un empleo asalariado.”
Es probable que esto se deba al bajo rendimiento en el trabajo, uno de los muchos problemas causados por el agotamiento. Y luego están los otros problemas.
“Algunas personas probablemente no piensan en la apnea obstructiva del sueño como algo mortal, pero es mucho más peligrosa de lo que pensábamos inicialmente”, afirma García.
Afortunadamente, según García, existen opciones de tratamiento para la apnea obstructiva del sueño.
“Lo primero que hay que hacer es acudir a un especialista del sueño. Después, si es posible, hay que cambiar el estilo de vida”, dice.
Los cambios en el estilo de vida incluyen perder peso y utilizar una órtesis para dormir, que ayuda a abrir las vías respiratorias mientras se duerme. Los aparatos ortopédicos se adaptan a la boca del paciente y han demostrado ser más eficaces que los tratamientos tradicionales de la apnea obstructiva del sueño.
“Conseguir algo que estés dispuesto a usar y usarlo puede ser la clave para salvar tu vida”, afirma García.